La constitución de una empresa familiar puede suponer un ahorro fiscal significativo, pudiéndose acoger a reducciones de hasta un 95% en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Además, este tipo de empresas ayudan a realizar una mejor gestión de los ingresos familiares.
Para que una empresa sea considerada familiar desde el punto de vista fiscal es necesario que sea una entidad mercantil, SL o SA, o un grupo de empresas del que una persona posee al menos un 5% de las acciones. En el caso de que la empresa pertenezca a un grupo familiar (padres, hijos, hermanos, nietos, cónyuge) la participación mínima sería del 20% de toda la unidad familiar.
Que requisito necesita cumplir una empresa familiar?
Además, para poder obtener las correspondientes ventajas fiscales, este tipo de empresas deben cumplir los siguientes requisitos:
- La empresa no debe tener como actividad principal la gestión de un patrimonio mobiliario o inmobiliario, es decir, más de la mitad de su activo debe estar constituido por elementos que no estén relacionados con inmuebles para uso particular, acciones en Bolsa, préstamos a terceros o fondos de inversión, entre otros.
- En el caso de que se trate de un grupo de empresas o holding, éste deberá poseer más del 5% de las acciones de las empresas y gestionarlas.
- La participación del sujeto pasivo en el capital de la empresa debe ser superior al 20%. Dicho sujeto debe ejercer funciones de dirección en la organización de la entidad y percibir por ello una remuneración superior al 50% del total de sus rendimientos empresariales, profesionales y laborales, es decir, debe ser su principal fuente de ingresos.
- Si se cumplen todas las condiciones, las empresas familiares podrán obtener exenciones en el Impuesto de Patrimonio, en las Comunidades Autónomas en las que no esté bonificado al 100%, e importantes reducciones en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. En España, las empresas familiares representan el 89% del total de las empresas privadas y dan empleo a un 14% de trabajadores, lo que supone un 67% del total de puestos de trabajo en el sector privado.